23-03-2024 Ruta desde la Base del Caballo hasta el collado del mismo nombre, bajada al río Lanjarón, ascenso al Refugio de Elorrieta con descenso otra vez por el valle hasta el Refugio Peñón Colorado, paso por el abrigo del río Lanjarón y subida al collado del Caballo y vuelta.
La ruta de hoy como todas viene de un largo proceso observación de condiciones meteorológicas y de las condiciones de la nieve, pero incluso después de esto no hay nunca garantía de que vaya a salir bien. La ruta empezó siendo una y por las condiciones meteorológicas acaba siendo otra, de ser una excursión en la que de la base del Caballo queremos subir a las fuentes del Dúrcal, después al Cartujo y de ahí al rio Lanjarón y Refugio Elorrieta, bajando después por el río Lanjarón. Pero las condiciones del día nos hicieron hacer otra ruta.
Hoy vamos el equipo completo, los hermanos Lavado, Pepe y Melchor, Miguel Prados, Antonio y Marian Salas y yo. Como siempre desayunamos en la cafetería de la plaza del pueblo en Nigüelas y para arriba, que larga se hace la pista, son 13km que nos llevan a 2100m donde empezamos con los esquís en la mochila, la nieve no esta lejos, pero los primeros 100-200m de desnivel tenemos que portear los esquís a la espalda. Una vez nos ponemos los esquís cada uno va buscando su camino, no hay mucha nieve de primeras y hay que sortear muchas manchas de tierra.
Esta vez el viento nos va acompañando toda la subida y no apetecen paradas ni para hablar ni agruparse, lo que hace que hasta casi el final no nos agrupemos, vamos cada uno a su ritmo y en sus pensamientos, yo llevo la música y la verdad que disfruto de la subida a un ritmo pausado y constante. Una vez llegamos al collado del Caballo las condiciones de viento nos hacen dudar si seguir, el viento te tira literalmente, pero decidimos probar suerte y ver si en el valle hace menos viento. La salida del collado es complicada, esta muy empinada y el viento no ayuda.
Bajamos e intentamos una media ladera no muy alta para evitar posibles aludes y a la vez no perder mucha altura. El viento es muy fuerte, incluso yendo hacia abajo dificulta el avance. En estas condiciones y por las ganas de sumar un nuevo refugio decidimos llegar como mínimo a Peñón Colorado y allí ver las condiciones.
Con forme vamos subiendo el viento comienza a disminuir y nos vamos animando, llegamos a Peñon Colorado y decidimos seguir hasta la laguna de Lanjarón y allí ver. Me encantan estas subidas por los valles, el paisaje es espectacular, las laderas nevadas, el agua que sale en ciertos puntos, la sensación de estar en un sitio privilegiado invade nuestro animo y una vez llegamos a la laguna decidimos subir al Elorrieta.
El Elorrieta es de esos sitios llenos de historia, llenos de anécdotas propias, en definitiva un enclave increíble donde gusta ir porque te transporta a otras épocas y a otros momentos y recuerdos. Hoy está cubierto totalmente de nieve y no podemos acceder a ninguna de sus estancias, pero sorprendentemente el aire casi a desaparecido y nos permite tener un merecido almuerzo lleno de risas, sol, compañerismo, afecto. Uno de esos momentos que igual no apreciamos ahora, pero seguro podemos guardar como algo especial y que recordaremos la próxima vez que visitemos este lugar y lo sumaremos a los otros recuerdos especiales que ya estarán para siempre unidos a este lugar.
Seguimos el descenso hasta que acaba la nieve que es justo donde encontramos un abrigo o refugio vivac, básicamente una roca que sobresale en la que han puesto piedras para proteger del aire, en Sierra Nevada hay muchos y algunos los iré documentando también.
Elorrieta es solo la mitad de la ruta, nos queda el descenso por el valle y la subida al collado del Caballo, así que no podemos demorarnos mucho y empezamos el descenso. La nieve está de vicio, el valle de Lanjarón no suele decepcionar, cada uno va trazando sus huellas en las laderas vírgenes hasta nuestro siguiente objetivo el refugio de Peñón Colorado. Es un refugio que está tapiado ya que se instaló una colonia de murciélagos. Peñón Colorado es un sitio precioso en invierno y en verano, el río hace un remanso y el valle abre un poco, a mi me encanta vivaquear en verano aquí junto con mi perro, raro es el año que no hago visito esta zona en el verano.
La subida es una larga media ladera en la que evitamos ir por las zonas altas para evitar cualquier deslizamiento de la nieve, siempre vamos buscando zonas cercanas a las manchas de tierra y roca que ya sobresalen en muchos sitios. La subida por este valle con el Caballo al fondo es de las más fotogénicas de la excursión y deja en nuestras retinas y móviles imágenes preciosas. Son unos 250m de desnivel hasta salir al collado, donde nos recibe otra vez un viento fortísimo. Quitamos pieles y empezamos la bajada, la nieve está pesadísima y muy cambiante, vas descendiendo y te frena hasta casi caer de boca. No son las mejores condiciones para unas piernas ya bastante cansadas, pero como podemos hacemos el descenso hasta los coches.
Ha sido un día raro por el viento, pero que hemos disfrutado quizás de una manera más individual y de pensar que igual no podríamos hacer nada a poder cumplir con nuestro objetivo llevándonos 3 refugios más, hace que lleguemos pletóricos. Un gran día de montaña en el que no podemos olvidarnos de los que no pueden disfrutar como nosotros porque están enfermos, donemos sangre y medula para salvar vidas…